“Hola, te habla tu ancestro…" son las primeras palabras de una canción protesta climática de la cantante neerlandesa Nynke Laverman. Ella actúa con su arte frente a la emergencia de nuestras vidas. Aquí, desde Triodos, impulsamos estas medidas concretas por las generaciones actuales y futuras mientras tiene lugar la Conferencia de Cambio Climático de Naciones Unidas en Egipto (COP27).

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Basta de deforestación

Triodos Bank apoya el intento del Parlamento Europeo de involucrar a la banca en la lucha contra la deforestación, causa relevante del cambio climático. En concreto, no queremos que los bancos financien de forma directa ni indirecta actividades que provoquen la deforestación. En estos momentos, el 23 % de las emisiones de efecto invernadero están relacionadas con la agricultura y la silvicultura, y la deforestación está entre sus consecuencias más dañinas a nivel climático.

No más petróleo y gas

Queremos ir más allá de lo que ya hacemos en este capítulo, que es no financiar combustibles fósiles, sino solo energías limpias. Por eso, alzamos la voz para que todas las instituciones dejen de invertir en la prospección y explotación de energías con alto impacto climático, como el petróleo. Pensamos que, en un momento de crisis energética, volver a impulsar el petróleo y el gas supone entregarse a un espejismo, con una crisis climática evidente y que ya se hace sentir.

Defendemos la creación de un mecanismo de tasación del carbono para que el coste social y ambiental de las industrias que lo generan de forma intensiva quede plenamente reflejado. También pedimos desmantelar de forma sistemática los subsidios a los combustibles fósiles.

Hacia una banca sin emisiones

El año pasado anunciamos nuestro objetivo de alcanzar el cero neto en emisiones en nuestros préstamos e inversiones en 2035Esto significa, en pocas palabras, que las emisiones totales de gases de efecto invernadero vinculadas con los proyectos que impulsamos sean iguales o inferiores a las emisiones que eliminamos del medioambiente a través de otras iniciativas financiadas.

Es uno de los objetivos más ambiciosos del sector financiero a nivel global, donde muchas entidades trabajan para hacerlo realidad quince años más tarde, en 2050. Pensamos que nuestro mundo no puede esperar tanto y esperamos generar una influencia positiva cuanto antes en nuestro entorno.

Transición justa

Nunca hemos creído que los retos ambientales y sociales estén enfrentados, sino todo lo contrario. Como decía hace poco el corredor y activista climático Kilian Jornet: “al final, el planeta, las montañas, van a seguir ahí, aunque desaparezcamos nosotros/as. Al final, de lo que se trata cuando abordamos la crisis ambiental, es de salvarnos a nosotros/as mismos/as”. Sin embargo, es imposible ocultar el hecho de que el cambio climático afecta de forma mucho más grave a aquellas personas que hicieron menos para causarlo.

Desde nuestro punto de vista, no se trata de reducir el ritmo de cambio o inventar excusas porque estamos en una emergencia, pero sí de asegurar que ofrecemos soluciones de conjunto, por una transformación a partir de una transición justa.

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