Cada vez tenemos más posibilidades de acceder a productos de comercio justo. Pero esta realidad no se hace posible sola, sino que forma parte, entre otros, de una cadena de distribución específica y de la suma de muchas voluntades.
“Las entidades importadoras financian por adelantado la producción, lo que favorece el desarrollo de los productores y sus comunidades”,explica la Coordinadora Estatal de Comercio Justo.
Por qué el comercio justo implica otro enfoque de las finanzas y de qué manera la banca ética contribuye a que nos encontremos una mayor oferta de productos.
Requisito del comercio justo
Dentro del estándar del comercio justo, se requiere que el distribuidor ofrezca un soporte financiero al productor. “La prefinanciación es una obligación del comprador de comercio justo y puede perder la certificación si deniega acceso a financiación al productor sin dar una buena razón para ello”, establece el sello Fairtrade.
Entre otros beneficios, “los estándares Fairtrade permiten a los productores solicitar un prepago parcial de contratos, importante para pequeñas organizaciones agrícolas, porque asegura que tengan fondos en el momento de la cosecha”.
Comercio justo en los muebles de jardín
Uno de los resultados de los acuerdos de paz de Guatemala de 1996 fue la creación, varios años más tarde, de la Empresa Comunitaria de Servicios del Bosque (FORESCOM). La iniciativa trabaja con criterios de comercio justo, con gestión directa de las comunidades locales, y también con la certificación FSC, que garantiza una actividad forestal sostenible.
Su historia es un ejemplo de las múltiples alianzas que requiere este comercio internacional con valor añadido social. En 2011, FORESCOM entró en contacto con la ONG española COPADE. Y, posteriormente, se pudo concretar la oportunidad de comercializar sus productos en los establecimientos de Leroy Merlin, lo que facilitó su acceso al mercado.
En paralelo, Triodos Bank colabora desde hace años con el sello Madera Justa, promovido por COPADE con la intención de identificar productos de origen forestal que aúnan criterios sociales y ambientales, haciendo la vida más fácil al consumidor. La relación ha dado un paso más con la prefinanciación de Triodos Bank para los productos de madera de acondicionamiento de jardín de FORESCOM que se comercializan en Leroy Merlin.
Banca ética para más comercio justo
Pese a que “el precio mínimo garantizado del comercio justo ofrece a los productores una mayor seguridad incluso en tiempos inciertos, la recesión mundial crea una necesidad urgente de ampliar la financiación al comercio justo”, recogía un informe de FairTrade poco después del estallido de la crisis financiera internacional.
Ante esta necesidad y de acuerdo con su misión social original, Triodos Bank cuenta con una trayectoria relevante como socio financiero de las iniciativas de comercio justo.
Además de emplear el dinero de sus ahorradores para financiar a las principales entidades que lo promueven, ha creado herramientas específicas para apoyarlo. Es el caso del Triodos Sustainable Fund, un fondo de inversión responsable dedicado a este ámbito y el de la producción ecológica.
“Quienes comercian justamente aseguran un pago puntual a sus socios y, en lo posible, apoyan a los productores y productoras a obtener acceso a financiación para las fases previas al cultivo y la cosecha”, explica Oxfam Intermón, otra de las entidades activas en comercio justo y que trabajan con Triodos Bank.
Entre todos, sin olvidar el papel esencial del consumidor responsable, se hace posible que ya “más de un millón de pequeños agricultores, trabajadores y trabajadoras en más de 74 países se beneficien del sistema de certificación de Comercio Justo”, como recoge la organización del sello de comercio justo en España.
+ Financiación de Triodos Bank en comercio justo
+ Apoyo de la Fundación Triodos a proyectos de comercio justo
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